¿Cuando me irá a llamar el gobernador electo?
La siguiente nota es una transcripción de las tribulaciones de Julio López Robles , a quien agradecemos que nos haya autorizado su publicación: La verdad estoy muy preocupado. Faltan ocho días para el cambio de poderes y no hay ninguna señal de que el gobernador electo haya pensado en mí. Hasta dos semanas después del día de la elección yo encontraba muy natural que nadie me invitara a ninguna reunión, pues todo mundo había trabajado duro en la campaña y tenían bien merecidas dos o tres semanas de descanso. Pero terminó febrero y nadie me dijo nunca que hubiera asistido a una reunión. Empecé a creer que tal vez fuera a mi al único que no invitaban y que todos guardaban silencio. Y me angustiaba pensar que quizá le hubieran contado un mal chisme de mí al candidato. Pero yo mismo me reanimaba recordando la efusividad con que me saludaba cuando en los actos de campaña, acomodado entre las sillas más cercanas a la escalinata del presidium, casi provocaba que el entonces candidato se tropez